Publicado el 08 de julio del 2011
Subjefe de la Bancada de Diputados DC, Gabriel Silber, denunció contradictorias versiones en torno al Fondo para la Educación. “Entre el Presidente y el Ministro de Hacienda, el país, y especialmente los estudiantes, merecen saber la verdad, además de letra chica, alguien no está diciendo toda la verdad”.
El subjefe de la Bancada de Diputados del Partido Demócrata Cristiano, Gabriel Silber, acusó que tras los anuncios efectuados por el Presidente de la República en educación, “nuevamente encontramos letra chica y en varias de las medidas, denunciando inconsistencias que existirían en el Fondo para la Educación , la entrega de becas y la reconstrucción de establecimientos.
Sobre el Fondo, Silber sostuvo que “Piñera habló de un Fondo de Educación de US$ 4.000 millones de dólares y ayer el Ministro de Hacienda dice claramente que ese fondo no constituye gasto y que sólo actuará como garantía, la muestra más clara de una letra chica que ya se ha vuelto común en los anuncios presidenciales”.
El parlamentario emplazó al Gobierno a aclarar públicamente la verdad sobre este Fondo.
“Las declaraciones del Ministro de Hacienda no corresponden a lo anunciado por el Presidente Piñera ni a lo explicado por Ministro de Educación. Si los US$ 4.000 millones son sólo garantía eso implica que no hay recursos adicionales para la educación superior. Lo que el Ministro Larraín ha dicho es que sólo se hará un traspaso de platas de una cuenta a otra y no habrá inversión adicional en educación. Otra vez la letra chica en esta administración”, dijo
“El país necesita un aumento permanente de la inversión en educación, no con los excedentes por el mayor precio del cobre, sino con ingresos estables derivados de una mayor tributación de las empresas, tal como lo ha manifestado nuestra bancada de manera reiterada”, agregó.
El congresista señaló además que “el Fondo para la Educación no puede ser sólo maquillaje contable como lo propone el Ministro de Hacienda. Debe haber inversión adicional en educación de calidad; si los US$ 4.000 millones para educación son operaciones contables rechazamos esta burla a los chilenos y chilenas. Exigimos que el Presidente Piñera aclare la verdadera dimensión del Fondo para la Educación y desde ya le decimos que no aceptaremos esta nueva letra chica de anunciar esos recursos y después no invertirlos en educación”.
Hizo hincapié, asimismo, que “si al Gobierno le preocupa el efecto macro de invertir US$ 4.000 millones, este se puede financiar con mayores impuestos de las empresas de esa forma no genera déficit fiscal y ayuda a mantener la competitividad. Una inversión permanente y virtuosa como es la educación de calidad para todos y todas requiere ingresos permanentes como alzar el impuesto a las empresas y no debe financiarse con ingresos transitorios como son los excedentes por el mayor precio del cobre”.
“Otra letra chica es con las becas y ayudas estudiantiles al 40% de jóvenes que provienen de familias vulnerables y que se plantea, el día después, que se exigirá 550 puntos en la PSU. El 2010 más del 60% de los alumnos estuvo bajo ese puntaje de corte; probablemente en el 40% más vulnerable ese porcentaje llega al 80%. Se da un beneficio como las becas pero se coloca un punto de corte exigente que lo convierte en un conjunto semivacío. Según la CASEN 2009 sólo un 18% de alumnos del quintil más vulnerable va a la educación superior y esto se mantendrá si se mantiene “la letra chica” que promueve este Gobierno”, recalcó el parlamentario.
“Ante esto postularemos rebajar el punto de corte del puntaje PSU a 500 puntos y que se incorporen variables pro equidad como son las notas de Enseñanza Media y que se premie al 15% de las mejores notas del ranking de egreso de los colegios. Romper la desigualdad de acceso en la educación superior implica no sólo seleccionar vía PSU sino incorporar las notas de Enseñanza Media y su posición en el egreso de 4º medio”, añadió.
“Sumamos también a la letra chica los anuncios de que los 4.500 colegios afectados por el terremoto están en reconstrucción. No es así: el Gobierno recortó en $ 59.000 millones el Fondo de Infraestructura destinado a financiar la reconstrucción de colegios y aún no se implementa el Fondo de Infraestructura Educativa creado en la Ley de presupuestos 2011”, planteó el diputado.
“Tampoco es verdad que se está implementando la nueva institucionalidad escolar (agencia de la calidad y superintendencia de educación); esa ley aprobada por el Congreso el 20 de abril aún no es publicada por el Gobierno en el Diario Oficial. Han pasado 80 días y aún no se promulga ese cuerpo legal”.
Finalmente, el subjefe de la bancada DC expresó que “el país y en especial los jóvenes quieren una educación de calidad para romper con las actuales desigualdades. Lamentablemente, el Gobierno hizo anuncios que a las 48 horas nos damos cuenta que no son tan verídicos. No hay inversión adicional de US$ 4.000 millones para la educación, es sólo una operación contable, traspasar recursos de una cuenta a otra. Eso es una burla y una falta de seriedad que no se merece la sociedad chilena que reclama una educación de calidad”.
Por: Cámara de diputados
Fotos: Archivo diario tropezón
