En el octavo capítulo del programa Dispersos de Tropezón, nos acompañó la exdirectora del Liceo CEP, Verónica González, y el presidente de la Federación de Sindicatos de Metro, Eric Campos.
En la última edición del programa Dispersos de Tropezón, fueron invitados la exdirectora del Liceo Centro Educacional Pudahuel (CEP), Verónica González, y el presidente de la Federación de Sindicatos del Metro de Santiago, Eric Campos.
Entre otros temas, los panelistas conversaron sobre el uso de la tecnología en la educación durante la pandemia, y cómo se ve el panorama en cuanto a la automatización de los puestos de trabajo. Al respecto, Eric Campos aseguró que “el cambio tecnológico no es negativo para los trabajadores, sin embargo, hay que identificar qué ha significado en el ámbito del Metro: se dejaron de crear empleos. Una línea robotizada, sin conductor, es un modelo para que funcione sin trabajadores. No solo no hay conductor, no hay personal en el andén, no hay gente haciendo el aseo, no hay cajeros. Y no está tan comprobado que aumente de manera significativa los tiempos de viaje”.
El presidente de la Federación de Sindicatos de Metro agregó que: “No solo tiene que ver con el reemplazo de personas por tecnología, también afecta a los que quedan en la empresa, porque se hacen polifuncionales o multifuncionales. Hay mayor carga laboral, hay mayor precarización, y eso es lo que ha significado al menos en el marco de la industria del transporte público”.
En cuanto al uso de la tecnología en educación, la exdirectora del Liceo CEP, Verónica González – quien ejerció el cargo desde el 2016 hasta el 2021 – entendió que la llegada de la tecnología como un recurso para educar, es una ventaja de la pandemia: “La pandemia ha tenido lados buenos y malos. Los jóvenes, sus familias y los profesores nos tuvimos que enfrentar a un paradigma distinto: cómo hacíamos educación. Las clases remotas también permitieron que los profesores innovaran y fueran conociendo otros aspectos de lo que es la informática. Yo siento que esto llegó para quedarse, que hay un antes y un después”.
Sin embargo, “el problema mayor es que los jóvenes no tenían equipo ni acceso a internet, ahí está el problema. Hay que proveer de estos elementos para que ellos puedan avanzar. El celular posibilita que los jóvenes estén conectados. El año pasado el 40% de los jóvenes de cuarto medio tuvo que salir a trabajar por el tema de la pandemia. Gracias a los teléfonos (incluso les conseguimos) podíamos tenerlos conectados. En la educación la tecnología tiene que ser innovadora y utilizarla en la mejor medida posible”, concluyó Verónica González.
Por Aracelly Bravo Saavedra
