Reclaman malos tratos tanto en el municipio como en otros servicios en su exterior. “A una familia con COVID-19 le llevaron una caja de mercadería, primero se la dejaron tirada en la vereda pudiendo haberla dejado en el antejardín, además venia un tarro de salmón filtrándose lo que hizo que el resto de los alimentos”, reclamó una vecina.
Pudahuel, Santiago de Chile, 14 de enero 2021. Dos dirigentas sociales indignadas por el trato que algunos funcionarios municipales le dan a la gente al momento de requerir algún servicio. Estas coinciden en señalar que están cansadas de recibir comentarios de sus vecinos y vecinas
que recurren a ellas por desahogo, frente a diferentes desatenciones que han recibido por parte de personas que trabajan en la Municipalidad.
La dirigente de junta de vecinos, Bienvenida Cárdenas, señaló a Tropezón que “he recibido muchos reclamos de vecinos y vecinas de comentarme que han tenido una atención deficiente en el municipio de Pudahuel en donde la dignidad es lo menos que se aplica”.
“Ayer fui comprobar aquello y que es tan verdad lo que se me decían. A las 11:00 de la mañana comienzan a fumigar oficinas y todos para afuera, quedamos todos amontonados en un sector por más de una hora. Entré en cólera por esa y otras situaciones más y pude comprobar todo lo que decían. El personal municipal de atención al público está bien protegido y eso está bien por ellos, pero ¿qué pasa con nosotros? Sé que hay normas que cumplir, pero el ingresar al municipio de mi comuna, es más difícil que entrar a un penal de recluso”, argumenta Bienvenida Cárdenas.
En tanto, la dirigente social, Haydet Drogett, señala que siente impotencia y rabia por el trato que se le da algunas personas por parte de personal municipal. “Hace algunos días hubo una discriminación a un adulto mayor que está solo y arrienda una pieza. Intervine ante el municipio y se pidieron las disculpas por parte del depártame responsable”.
“La molestia de los vecinos no para con el municipio, ahora una familia infectada con COVID-19 en cuarentena, me llama por teléfono y me envía un audio y fotos de una situación que se considera aberrante. Le llevaron una caja de mercadería, primero se la dejaron tirada en la vereda pudiendo haberla dejado en el antejardín, además venia un tarro de salmón filtrándose lo que hizo que el resto de los alimentos terminaran mojados y contaminados y con un desagradable olor a pescado”, indicó Drogett.
