Uno de los dolores de cabeza más grandes para las autoridades con respecto al funcionamiento del Transantiago, es el tema de la evasión. Acto que algunos justifican por el alto precio del pasaje, pero que a los encargados del sistema, les ha generado pérdidas millonarias.
Por eso, el actual Gobierno tomó la decisión de combatir este problema con medidas radicales, que desde el segundo trimestre de este año, comenzarán a regir en varias comunas de la capital, entre ellas Pudahuel (Quilicura, Recoleta y Vitacura), donde se aumentará la fiscalización a 185 mil usuarios diarios, agregando más puntos de control, realizando campañas comunicativas, y ejecutando un sistema de validación móvil para los paraderos con alto flujo.
La noticia fue anunciada por la empresa Alto Evasión, en el marco de la tercera etapa que corresponde a la campaña Tolerancia Cero a la Evasión, y que involucrará a la concesionaria Alsacia Express, donde la medida será aplicada a los troncales 100, 400 y servicio D.
En este contexto, el gerente general de Alto Evasión, Juan Cristobal Palacios, comentó que “queremos que los usuarios tomen conciencia que cada vez que no pagan su pasaje, están robando 600 pesos, lo que produce pérdidas al sistema de transporte público por más de $600 millones diarios e impide que mejore. La gran mayoría de los usuarios son personas honestas, responsables y respetuosas que piden que los evasores cambien su comportamiento y se sumen a la mayoría que paga su pasaje”.
Cabe destacar que en sus etapas anteriores, el plan ha logrado reducir en un diez por ciento la evasión, lo cual corresponde a 39.000 pasajeros.
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